20/6/14

Poema de Sonia Rabinovich

  
Escrito en la espalda 

Ella no mira su cara ,
sabe que el escribe un mundo
porque un haz luminoso se deslíe
sobre la piel del hombro, la nuca
y descorre lo inoportuno de un cabello.
Ella está quieta
respira lento
teme disipar el mantra
que el repite, vértebra por vértebra,
hasta llegar a la cintura.
Nadie sabe leer.
Analfabetos en el paraíso.

Ella se vuelve,
la mano dibuja en su boca
el final del poema.
Ella muerde la última letra.

No puede moverse,
teme que las letras caigan,
que las palabras se destiñan
con la humedad,
que resbalen y formen otro texto.
No quiere moverse,
pero escucha el reloj
y escucha el viento
y el sonido del agua de algún río
y Heráclito y los mismos y no somos
y no quiere moverse.



         © Sonia Rabinovich

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2 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

muy buena construcción , las tres líneas finales, perfectas para lo que antecede. susana zazzetti.

20 de junio de 2014, 14:11  
Blogger sacanueces ha dicho...

deliciosooooo!!!, me encantó!!!
gracias por compartirlo, francisco

28 de junio de 2014, 21:52  

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