Poema de Nerina Thomas
Cuando duelen los huesos
uno descubre otro ser en uno.
Parecemos
una estatua cuando intentamos
levantarnos
de la cama. Ellos deciden ...
los mismos huesos, articular los mismos.
Una hora por reloj, llegar al baño.
El paso se hace lento, que en verdad
es arrastrar los pies con la alfombra
que acompaña al bajar de la cama.
Uno está como frizado tratando de llegar
a tiempo .
El desgaste dijo el médico, además de los
genes
Una tortura para quien lo padece.
No tuvieron en cuenta la caminata diaria de
una hora
ni aquagym, ni pedalera.
Duelen y basta.
Acupuntura mas cartílago de tiburón,
colágeno, vitamina C,
más magnesio, para poder caminar y sin
dolor
luego de una semana de ejercicios y
kinesiólogo.
El cuello demoró en acomodarse, más que
otras zonas.
Nada de computadora por ahora, ni de
lecturas prolongadas
ni
pensar en rendir un final.
A conformarse con lo promocionado. Hasta
acá.
El dolor físico es intolerable, solo se sostiene con sublinguales,
Él no acaricia.
© Nerina Thomas
Etiquetas: Nerina Thomas
1 comentarios:
Neri , el poema que abre la puerta , este recurso que nos re significa. Bello .Abrazo amiga querida
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