Poema de Patricia Berho

Gritos que interpelan 

                                                        

                             Ante el grito                                                             

                     ¿qué posición tomás?

Con mi alma urraca que hurga desordena

Y grita

Luz Nocturna entre desdeñadas

Posar sobre aquello que transporta ternura

me lleva a pensar en los besos y las ganas de amar

de la señora que sube al colectivo

Su boca torcida -de golpes que aúllan-

Ordena a los pequeños que la acompañan

-La pienso porque la siento-

Que del éxtasis se pasa al viejo malhumor, a la disculpa

Al humor que se alimenta de la desdicha

 y la mirada esquiva

Como la mujer abandonada en el umbral de un edificio

Porque recuperó su andar de hembra fuerte

Alienada de ausencias

Fantasear y hacer remolinos en las tragedias

 esa mujer era yo en la pobreza y violentada

Cargada y cargosa

Harapienta de labios pintados

Analfabeta como mi abuela

Sucia privada de agua

Sangrando mi corazón de pedir y pedir

Más cacatúa que urraca: aprendí a gritar 

Por ser fiera de fieras saltar e irrumpir en lo banal y estéril

Porque era yo y mi rostro mutado,

Con un ojo más pequeño

Que me avergüenza   de sentir vergüenza.

y me advierte:

Todo ocurre por primera vez

Y transcurre en veces en voces en vicios

… en vidas

Hasta que ocurre por última vez

 en filo en formas en foramen

hoy que no callamos

ante el grito:

                        ¿qué posición tomás?

© Patricia Berho