20/12/15

Poema de Clelia Bercovich


CADA VEZ MÁS CLAROS ERAN SUS OJOS 

Sentada en el sofá de su casa  era una herida  entre las fotos 
Nos íbamos  al bar frente a la plaza 
y  le aconsejaba cosas absurdas: 
 de cómo  mejorar  su vida y otras mentiras 
 cuando me conmovía y estaba por llorar. 
Le proponía ir a ver ópera, 
comprar  un tapado de pana  
 o pasear por la ciudad  en un auto negro 
en  la llovizna de un sábado 
Tomábamos café con crema 
( Ella no quería  nada.) 
En el bar recordaba distanciada de todo 
Y cada vez  más claros eran sus ojos. 
Habló  de unas  hermanas que en el pueblo 
 fueron  reinas de belleza 
Habló de un verano, 
 de los veranos.  
 De   un tiempo 
en el que no estaba yo.



© Clelia Bercovich

1 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...



Absolutamente conmovedor, Clelia. Este poema es una maravilla.


Abrazo grande.

Alicia Márquez

20 de diciembre de 2015, 17:30  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio