6/2/13

Poema de María Elena Tolosa


La lluvia me castiga lujuriosa,
     como a las flores que marchita,
     es un amante ansioso, voraz
         lo quiere todo 
            para huir luego
dejando pétalos esparcidos
y deseos insatisfechos,
no quiero ansiar su regreso
         solo deseo su fuerza arrasadora
         una y otra vez
y el agua resbalando
mi boca en un suspiro

 

© María Elena Tolosa

12 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

así se construye el poema, maría elena, querida amiga de los miércoles, con toda el alma, la pasión.susana zazzetti.

6 de febrero de 2013, 16:00  
Anonymous Anónimo ha dicho...



Tu poema también tiene la fuerza arrasadora de la lluvia.
Me encantó.

Un abrazo,

Alicia Márquez

6 de febrero de 2013, 18:15  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Muy bien María Elena!! Me gustó!!


Lily Chavez

7 de febrero de 2013, 9:36  
Blogger Isabel ha dicho...

Muy original la analogía entre la lluvia y un amante, temporario y que deja restos deshechos. Sigue el yo poetico suspirando. Gozar sufriendo que la poesía legitimiza. A vecer quisiéramos samarrear la soledad con una fuerza así. Muy, muy logrado, María Elena. Un beso de Isabel Llorca Bosco

7 de febrero de 2013, 10:56  
Blogger Elisabet Cincotta ha dicho...

Me gustó mucho tu poema.

Abrazos
Elisabet

7 de febrero de 2013, 17:23  
Blogger LIDIA CARRIZO ha dicho...

MUY BUENO EL POEMA ME GUSTA LA SUTILEZA LOGRADA CON FUERZA!...
DAR ENTIDAD DE AMANTE A LA LLUVIA!...
MUY BUENO .
LIDIACC.

12 de febrero de 2013, 1:26  
Anonymous Anónimo ha dicho...

María Elena, es esta otra veta poética que no te conocìa, pues este poema tiene fuerza y erotismo.
Un abrazo
Juany Rojas

14 de febrero de 2013, 16:49  
Blogger Adriana ha dicho...

Muy buen poema, apasionado y arrasador como la lluvia-amante que deja despojos en los jardines. Me gustó mucho eso de no querer esperar su regreso, sino sólo sentir el empuje arrasador, como si le negara al amante la posibilidad de ser ansiado, y lo redujera a ser sólo eso que arrasa. Muy sustil. Un beso. Adriana Maggio

14 de febrero de 2013, 19:04  
Anonymous Anónimo ha dicho...

María Elena: excelente poema, de un erotismo sutil, una vez escribí un poema que tenía estos versos, -amo la lluvia porque me penetra- algo de tu poema me lo recordó, la lluvia purifica pero también embiste, se produce una relación de entrega y placer... me gustó mucho tu trabajo, un beso, María Chapp

15 de febrero de 2013, 22:16  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Qué fuerza purificadora la lluvia...!, y lo es más cuando viene "tormentosa", no ?
Tu poema lo expresa bellamente y nos deja suspirando, uy, síii!
Beso grande Maria Elena
Montse Bertrán

17 de febrero de 2013, 20:27  
Anonymous Anónimo ha dicho...

David A. Sorbille dijo...
Excelente poema, Marìa Elena. Un gran saludo

21 de febrero de 2013, 20:49  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Erótico y suculento, Marieta de mi corazón!!!!
Me encantó.
Además volver a leer esta selección de Gus fue un placer renovado.
Mi abrazo y admiración
Te quiero
Alicia Perrig

26 de febrero de 2013, 15:31  

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