Poema de Jennie Escobar Montes
En la acidez
de mi zozobra
recorro los hemisferios
de un espejismo desarticulado.
La luz de mi rostro
pende
de una delgada llama
dispuesta a extinguirse
a medio camino.
En cada ojo
un velero encalla
con el tiempo
ceñido a una lágrima.
Conté los cabellos
del desvelo
con el dedo añoso
de mi silencio.
Mi impaciencia
fuma flores de humo
y en el cenicero
el grito de una colilla
deja caer su esqueleto.
© Jennie Escobar Montes
Foto: Gustavo Tisocco
6 comentarios:
Muy bueno, Jennie! Me gustó mucho tu poema, una zozobra que inventa rumbos espectrales.
Felicitaciones, un abrazo!
Silvia Rodríguez Ares
Entré a ese "espejismo desarticulado". Y me detuve. Y lo recorrí, Jennie. Nada diré de mi impaciencia.
Rolando
*
Muchisimas gracias Silvia por tu amable comentario... abrazo grande.
Rolando me siento halagada con sus palabras!!!!! p.d: a veces es mejor
no decir nada y dejar que el silencio
se exprese...abrazo
Hay un hilo conductor en este poema que atraviesa las imágenes con la magia de un poetizar en el sigilo; muy bello Jennie, felicitaciones!
un abrazo
Elisa Dejistani
Hay un ida y vuelta, entre el poeta y la acción.
Bravo!!
Vos sos otro de mis "creditos" Jennie. Da gusto hacer taller así...
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio