12/6/25

Nicolás Aused comparte a Ramella/Bozzo/del Mar

 

 

IV. Honrarás a tu padre

 

Confieso que

una vez me reí del llanto de mi padre.

 

Era domingo a la mañana y él

me contaba las películas de los sábados;

esos estrenos absolutos

que nunca llegaba a disfrutar

por mi edad, por el sueño,

por las eternas pausas comerciales.

 

Así que ese domingo mi padre

relataba con fervor La vida es bella

y llegando al final

una angustia endemoniada

se le atoró en la garganta.

 

Era la angustia del padre

contando la historia de ese otro padre

que hace morisquetas frente a su hijo

para que este no se entere

que su padre iba a ser fusilado.

 

Y yo

que nunca lo había visto llorar

también vi a un padre haciendo morisquetas.

 

Cómo iba a saber

que ese llanto que buscaba salir

en forma de impredecibles espasmos

no eran carcajadas.

 

Confundido

y sin entender el motivo de su risa

ante aquel dramático final

obedecí a mi deber de hijo

y reí, reí junto a él.

 

© Hernán Ramella


 

Río turbio

 

Camino solo por el pueblo

intento hacer equilibrio

yendo contra el viento sur

los perros me siguen los mineros pasan

con los camiones cargados y tiran

pedacitos de carbón a la vereda

para que no resbale me explican

yo me patino igual mis botas no clavan

firmes en el hielo pero da risa verlos

espolvoreando las calles a palazos

manchados de hollín desde las uñas

hasta los ojos, los ojos de los perros

tienen los mismos ojos que los perros.

 

© Manuel Bozzo


 

Un nombre

 

Tener un nombre

y matarlo

tener otro, crearlo

inventar un nombre

probarlo a tientas

masticarlo, escribirlo

con todas sus letras

en ambos sentidos

mayúsculos minúsculos

a diestra y siniestra

usarlo de espejo

robar un nombre

con honor o descaro

conjurarlo en boca

de otras

que el nombre sea

gemido usado escrito

llamado pensado tensado

por otras

existir a través

de y en un nombre

hacerse un nombre

y levantar con él

habitaciones amuebladas

alfombradas, aireadas

por ventanales amplios

y que el nombre

sea una casa

a la que volver

cada vez.

 

© Vir del Mar

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1 comentarios:

Blogger Alfredo Lemon ha dicho...

Gracias Nicolás por los poetas que trajiste. Me encantó "Un nombre" de Vir del Mar... Celebrante! Que el poema sea una casa a la que volver cada vez... como un refugio en tiempos aciagos.
Saludos desde Córdoba

13 de junio de 2025, 17:53  

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