Poema de Natalia Garay
Atrás queda el insistente silbido del vacío
nada que explicar, nada 
ni el cuerpo dormido 
ni la ausencia de frutos en el árbol
cuelga de cabeza el 
                               n
                             í
                          d
                        r
                     a
                   j
los pájaros vuelan   
en otro techo duermen los gatos
ya no hay voces que 
nos nombren
solo una pregunta
que lame despacio 
las collillas en el patio
el ropaje de las miradas 
y ese punto de fuga  
que nos duerme las manos.
© Natalia Garay
Etiquetas: Natalia Garay



1 comentarios:
¡Que bonito!
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio