Poema de Daniel Tomás Quintana
DILEMA
En
ocasiones
me detengo
y miro el
mundo.
Un avión,
pájaro
ingenuo,
juega en el
cielo.
Llovizna
muerte
en el patio
de una
escuela.
Los niños
corren
como niños
por el
verde insolente
de las
chacras
y saludan
al verdugo
a
carcajadas.
En
ocasiones
me detengo
y miro el
mundo.
Explota la
dinamita
en la
montaña
y el río
enjuga el llanto
del glaciar
herido.
Se
desploma
la
corriente
dando
saltos
y todos
maman
el veneno
en la fría
teta
de la
muerte.
En
ocasiones
miro el
mundo
y me
estremezco.
Entonces me
pregunto:
¿habrá que
envainar la poesía?
¿desterrar
sus huesos
al panteón
de los silencios?
O tal vez,
¿será más
saludable
izar su voz
en el
mástil del grito?
© Daniel Tomás Quintana
Etiquetas: Daniel Tomás Quintana
8 comentarios:
Levantar la voz para que vuele, libere, proteja, purifique! Abrazo grande Alfredo Lemon
Bello poema sobre el dolor del mundo, Daniel, y sí, es más saludable enarbolar el grito! Abrazos!!
La gran voz! Maravilloso poema y qué fuerte. Gracias por sus letras.
Ay Daniel!!!! Qué profundidad!!!
Adhiero a lo que comentan los compañeros del blog y como muy bien decís a "izar su voz/ en el mástil del grito"
Abrazo poético!!
Tere Vaccaro.
intenso con miu buen final. bella la imagen, sugerente. susana zazzetti
Mástil del grito!!
Besosss
Gracias a todos!
El mástil del grito y bandera para observar el mundo reclamar, ser parte, dejar la desidia a un costado. Poetizar el grito. Gracias. M. Comelli
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