Poema de Victoria Lovell
De espaldas
un kimono de seda blanca
hace girar
un abanico negro
conjura a
los espíritus
en el
centro del recinto
donde mi
padre ateo
trazó un
templo sintoísta
diciendo que era un garaje.
© Victoria Lovell
Etiquetas: Victoria Lovell
3 comentarios:
Espléndido! Crea una atmósfera (junto con la ilustración) parecida a esas pinceladas orientales de los grandes poetas de Japón. Bravo! Alfredo Lemon
Muy bueno! Breve a manera Oriental!
Precioso este poema Querida Victoria Lovel. Un abrazo.
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