20/3/18

Poema de Patricio Foglia




JOSÉ

Al principio, no hubo para mí ninguna buena nueva.
Yo estaba en el taller, preocupado por mi trabajo.
Cuando llegó, supe que algo había cambiado.
Dudé. Sentí miedo. Pensé en los vecinos:
Ahí va José, el carpintero,
su esposa espera un hijo que no es de nadie.
Sigo sin entender qué paso
pero tampoco me importa: mi Señor es justo y misterioso.
Soy un hombre sencillo, prefiero no hacer demasiadas preguntas.
Confío en mi corazón, y también en mi esposa.
Y si tengo dudas,
sigo trabajando, golpeo fuerte, sin decir nada,
atento a mi trabajo con la madera.

© Patricio Foglia

1 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

En determinados momentos es bueno aferrarse a la madera, el silencio y el trabajo.
Un abrazo
Betty Badaui

24 de marzo de 2018, 22:21  

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