8/3/17

Poema de Jorge L. Carranza


Plaza 

Regresé a la plaza
donde jugaba
con la barra
del barrio.

Era, por ese entonces,
como un continente.

Allí , a dos cuadras de casa,
probé la feroz belleza
del mundo.

Ahora parece más pequeña
y cada vez que vuelvo
empequeñece un poco más.

El agua que corrió
bajo el puente
hizo lo suyo.

Tal vez
cuando me aproxime
al último silencio
sea un minúsculo sol
difuso y tibio
navegando sereno
por mi sangre. 


© Jorge L. Carranza

5 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

gracias por invitarme a tu plaza, Jorge.

Me encanta tu poesía. Es aire fresco.

Abrazo

claudia tejeda

9 de marzo de 2017, 10:40  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Sin duda, la infancia siempre será un sol para sacar desde allí luces claras u oscuras, como este poema que la trae al presenta a pesar del tiempo pasado.
Un abrazo
Juany Rojas

10 de marzo de 2017, 20:59  
Anonymous betty badaui ha dicho...

Lo que fue, lo que es y lo que será. La plaza como símbolo y la sencillez que engalana al poema.
Un abrazo
Betty

10 de marzo de 2017, 23:50  
Blogger Liliana ha dicho...



Claudia Tejeda doce que tu poesía es aire fresco y no lo dudo por un instante. Beso.

Lily Chavez

12 de marzo de 2017, 19:37  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Què verdad, sí, se percibe, ese sentimiento de despoj0o, que el tiempo va entregadonos.
muy bien.
W.M.

21 de marzo de 2017, 18:05  

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