Pema de Ofelia Pereyra Nadal
“En pos de mi
libertad”
Yo amaba mi libertad,
no debía compartir otros gustos
tan sólo seguía mis impulsos
cargados de arrogancia.
Ostentaba mi libertad,
me confundían las palabras;
creía que amor era dolor,
que dicha era angustia,
que aceptar era renunciar,
que respetar era avasallar,
que dar era pedir.
Era dueña de mi vida,
de mis días bohemios,
de mis horas apacibles,
de mi rabia contenida,
de mi espíritu indomable.
Muchas veces rompí ataduras
por mantener mi independencia,
en favor de esquemas modernos
que respaldan tanta prepotencia.
Pero una mañana de sol
llegó a mi ventana
un pícaro jilguero;
con su bello canto
acarició mis oídos,
con tanta ternura
me embriagó el ánimo,
con sus ojos profundos
dominó mis ímpetus,
extendió sus alas
en triunfal vuelo,
mansamente me quitó el corazón
y se lo prendió al pecho.
Temerosa, agonizante,
temblaba de miedo;
abrí mis ojos extasiados,
la figura de aquel hombre
se acercaba sigiloso
con sus manos extendidas,
me abrazó apasionadamente
y dejó sobre mis labios
el más tierno beso.
Desechó cadenas,
abrió todos los cerrojos,
dejó libre mis deseos
pero yo quedé cautiva,
amarrada a su puerto.
Ya no soy un barco a la deriva,
tengo un destino seguro,
anclado a su vida.
© Ofelia Pereyra Nadal
Etiquetas: Ofelia Pereyra Nadal
1 comentarios:
Un poema de bellas imágenes y gran sensibilidad
Graciela Licciardi
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