24/7/15

Poema de Marizel Estonllo


En  la intensidad del instante

                              a Leopoldo Castilla 


Es en la proximidad del hallazgo donde el hilo sagrado de la luz
suspende el brillo sucediendo a la luciérnaga.

Expande la marca de un fuego en la sangre,
puja como el profético sentido en un aleteo purificador
y despliega la palabra plena
la deja caer
la gravita en causa y consecuencia
como remedio privilegiado
en el especial silencio ante lo irremediable.

Su talento hace hablar  a las grietas, un rincón de lo humano,
especifica lo singular en la veta del diamante,
como memoria de la piedra original.

Su poesía perfora el mundo,
lo averigua de cuajo,
lo resplandece en la arqueología de la miel
y encuentra al orfebre en  el tallado de su aroma ,
la sutil abeja ,medio y artífice,
bautizando el destino del poeta
ese que supo desde entonces que “el mar no cicatriza”.

La ecuación templada del miedo
cede a una reserva de serena clemencia
Y la vida emerge como una pasión herida en el caparazón de una tortuga de cristal.

El deseo es penumbra en la noche del después.

Atraviesa los paisajes de la emoción parida por contacto con la hechicera blanca,
la impecable nodriza de todos los soñadores,
y es ahí y entonces la posibilidad como realidad del mundo
dentro del evento total.

Lo que seduce del dolor nos desanuda en la inocencia
se cifra en sus ojos azorados
Y se reserva en sus manos amplias de silencios.

Esa flor desconocida de sí, se eleva ingenua y certera en un campo de cardos.

Nos convoca al encuentro del asombro en el tacto del instante
con la audacia sin par de un coraje desnudo.

Mientras el vacío tapiza la materia y la nada,

                                                       vibrando,

 en la   inexorable contundencia de lo inmediato.




© Marizel Estonllo

4 comentarios:

Anonymous m ha dicho...

Contundente Marizel ! Muy bueno ! Gracias !

25 de julio de 2015, 21:04  
Blogger Nerina Thomas ha dicho...

- Es la proximidad del hallazgo... -
Un cariño

26 de julio de 2015, 11:15  
Blogger Isabel ha dicho...

Marizel, magnífico poema.
Un beso Isabel Llorca Bosco

27 de julio de 2015, 22:13  
Anonymous Anónimo ha dicho...

me gusta esa "orfebería en el tallado de su aroma", me gusta todo el texto. Abrazo. PAOLANTONIO

31 de julio de 2015, 20:31  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio