Poema de Beatriz Minichillo

Insomnio

Avanza sobre mí,

dibuja luces

sobre mis párpados,

bruscamente los abre,

me obliga a obedecerlo,

me habla

en un idioma extraño,

me repite que no,

que ahora no,

esta noche no.

Me hace suya

entre tinieblas.

Me resisto,

me vence,

sus brazos fríos

sobre mi espalda.

Me pone frente al vacío,

me sacude con su viento helado,

nombra un país ignoto,

me quita los silencios,

me deja sin recuerdos,

baila entre mis sábanas.

Me retuerce los sentidos,

me parte en dos, en cuatro,

en ocho

y cuando ya no sé quién soy

se marcha

pero promete volver

y lo hace,

me suelta al borde de la nada.

Insiste otra vez

hasta que se agota

corrido por las horas,

se burla, las burla

y vuelve,

puntualmente vuelve,

dibuja una figura informe

cada noche, ahora, ya.

Entonces tomo mi daga de cristal

y la clavo allí, justo en su centro.

Su sangre coagulada

hacia ninguna parte,

una pesadilla de abismos,

de negruras,

Tarde, muy tarde

su carcajada ,

su brutal carcajada

me espera

para reiniciar el ciclo.

© Beatriz Minichillo