8/2/25

Poema de Luis Benítez

 

 

tal como el comienzo de una frase en el cielo

 

de los tableros de los ascensores cuando nos quedamos

a bordo y solos            de las ventanas que dan al mediodía

de una caja de bombones rancios en su estuche

de las palabras que dicen en la tele

del gesto de alguien familiar y ajeno que habla solo por la calle

del recuerdo de algo dicho en un baño por nosotros

salen los fantasmas las fantasmas hechos mitad de espejos

y mitad de desconfianza y otra mitad todavía de un asimilable estado

donde su protoplasma se funde en nuestras manos

pero nunca se deshace del todo

quién eras vos que no recuerdo pero sí tus sílabas

como el murmullo de uno que habla en la oscuridad

en qué recoveco del tiempo tu sábana se quedó enganchada

que ahora yo memoro cómo tomabas el té        qué opinabas

entonces de algo que olvidé       quién eras o qué fuiste

para disponer de esta erótica que me asalta a veces

(sin duda tu rostro es una ola del mar de lo conocido

-la ola que arrastra tu nombre y sus sargazos-

sin duda cada estremecimiento que me das fue una frase

cada mirada tuya está hoy vaporizada y te recuerdo

tan mentirosamente como se recuerda un sueño de la siesta)

qué función cumplen tus tics tus odiosos clichés ese vulgar acento

propiciando la imposible resurrección del cuerpo

la sustancia la palabra

inútil como la lluvia que cae solamente dentro de una caja

un arroyo en la esquina de una mesa

un dibujo dejado por un niño en el banco del parque

esta apenas diferencia de color que está en el aire

un ayuno del sentido una nada que habla

 

© Luis Benítez

Etiquetas:

3 comentarios:

Blogger susana szwarc ha dicho...

hermoso poema y su ritmo especial.

8 de febrero de 2025, 15:52  
Blogger Alfredo Lemon ha dicho...

Poeta inmenso Benítez. Esplendente tu divagación nos pone frente a esas presencias fantasmas que alrededor nos interpelan y muestran la sensibilidad del vivir, un hacer aproximado de lo que apenas alcanzamos a entender. Sensible y notable. Te abrazo grande

8 de febrero de 2025, 16:38  
Blogger Alicia ha dicho...

Todo el tiempo estamos así, rodeados de fantasmas.
De gestos, de voces, de suspiros.
Un abrazo,
Alicia Márquez

8 de febrero de 2025, 18:54  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio