Poema de Norberto Barleand
Oíd mortales
Llegó un ángel oscuro
con sus garras de odio
cegado en su mística salvaje
La Patria se fundó Estancia
con púas, estacas y bendecidas tumbas
Desde el Poder y
la conquista.
brutal en la impiedad,
fecundo en la vasija del castigo.
¡Alambraron la Tierra¡
Los dueños del cañón y los morteros,
del fuego y de la vida,
de las balas y el hambre
sepultureros de hijos y de vientres .
con rémoras de entrega
y el pueblo empobrecido por verdugos
con las vendas del triste vasallaje.
No podrán
con la memoria,
con el muro donde estallan
el coraje y las luchas de los ecos recientes,
una historia de luto y llanto
donde sublevada la sangre
han claudicado las
fauces del horror y de la muerte
con banderas, raíces
y huecos de furia.
Con los miedos,
el silencio,
con las astas
invictas
con la intemperie y el brillo
y las garras de fuego.
No se escuchan los ruidos de las rotas cadenas
No se observa el
trono a la noble igualdad.
Oíd mortales el grito sagrado
Libertad, Libertad , Libertad
© Norberto Barleand
Etiquetas: Norberto Barleand
2 comentarios:
Fuerte y contundente tu poema ! gracias
Ay ay pobre patria mía.. han despellejado los versos de la patria que nos hacía humanos. Gracias...❤️🦋
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