Poema de Gabriel Chávez Casazola
De su estancia
De su estancia en vaya a saberse cuáles ciudades de la
confusión
conservaba,
apenas a salvo de la humedad y el calor propio a esa
hacienda
estacada en el centro del verano,
unas cuantas revistas que en el cuarto de baño daban cuenta
de un pasado mejor, de unos años
de bullente actividad intelectual,
de grupos activistas, de talleres de cuento, de seminarios
lacanianos,
de círculos de discusión de la Escuela de Frankfurt
y otros misterios reservados para los iniciados en
el buen sexo y los porros de aquella época y de aquellas
ciudades de la
confusión
en las que esa mujer altiva y lúcida aprendió a preparar un
par
de buenos platos
—por ejemplo, pollo al mole—
que hoy junto a las revistas son todo el patrimonio que
perdura
de aquellos años dorados, esplendentes,
en que todos querían cambiar el mundo a fuerza
de bullente actividad intelectual y porros y Gramsci y hasta
de Louis Althusser,
hasta que Louis Althusser estranguló a su mujer e ingresó al
manicomio
y murió babeando su impotencia y su ira en un camino
lodoso, del color del mole del pollo al mole,
botando sangre como rojos un cuadro de Frida Kahlo,
ese lugar común ahora, por entonces aún un descubrimiento
en una de las tapas de aquellas revistas estacadas
en medio del baño de aquella hacienda,
estacada a su vez
en el centro de esa mujer altiva y lúcida, tan digna
en su derrota
como la golondrina de Wilde cuando decía
despreciar el verano.
© Gabriel Chávez Casazola
Etiquetas: Gabriel Chávez Casazola
7 comentarios:
Muy bueno!
Qué poema fuerte. Gracias!
Qué poema bueno, fuerte. Gracias!
que fuerte poema, gracias por compartir.
saludos
Anahí Duzevich Bezoz
Espectacular.
intenso, Gabriel. Un placer leerte. Abrazo
Gracias Gabriel , el pasado nos interpela donde quiera que estemos!
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio