Poema de Marisa Godoy
Calles vacías
I
Es domingo
y hay lo que no sucede
Un nudo ata y desata los pies del
mundo
Se abre una ventana en mitad de la
tormenta
Como si el corazón detuviera el pulso
al filo del acantilado
Hay un árbol violeta en mitad de la plaza
No sé su nombre
sólo su color
Y la tormenta
que lava
el domingo
© Marisa Godoy
Etiquetas: Marisa Godoy
5 comentarios:
Me encantó el poema. Qué buenas son las tormentas de los domingos. Te dejan limpia para volver a abrazar ❤️🦋
Hermoso
Bello y contemplativo... la naturaleza que nos interpela...
NATURALMENTE BELLO.
Saludos.
Anahí duzevich Bezoz
Hermoso poema y nos queda el violeta en los ojos!
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