4/12/23

Poema de Griselda Gómez

  


Lo que fui en Teotihuacan (Teōtihuácān)

 

Tras permiso entré repté

Con emplumada soledad

Sedienta al pie de piedras grises

Puro gemido y desconcierto

Fui dios aullando

En garganta del jaguar

Di vueltas rojas y celestes

En espeso vientre de la luna

Parida sin hora señalada

Surgida con sortija de jaspe y turquesa

Incliné mi desnudez estucada

En la pared

Antigua red de mí

(Más acá

Era el tiempo de los visitantes

Miles de sombreros blancos

Banderitas en manos de los guías

Catrinas rebeldes con vestidos verdes

Atlantes calaveras)

Dejé rodar el hambre

Pedí por todo lo que no había sido

Puse al costado

Penas y palabras

No pude trepar Casa del Sol

Me había convertido

En caracola de obsidiana

Rodeada por el fuego.

 

© Griselda Gómez

Etiquetas:

2 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Maravilloso!
"En caracola de obsidiana/ Rodeada por el fuego"
Todo el poema es un escalar/deslizarse/ impactante.
Alfredo Lemon

5 de diciembre de 2023, 11:43  
Blogger Gloria Arcuschin ha dicho...

Hermoso juego poético con las fuerzas ancestrales!!!!!!

6 de diciembre de 2023, 16:44  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio