Páginas

16/9/23

Poema de Luz Cassino

 

 

Equilibrista                 

 

Ahora está enredándose en mi cuello

y sube despacito por la nuca

y por un rato se acomoda tibio

sobre mi cerebelo, equilibrista,

se estira y trepa ágil a mi cara,

me toca las arrugas, ronronea,

baila danzas de guerra y frenesí,

sacude el avispero del espanto,

zozobra como un barco de papel

en mares de algodón, mares de sal.

 

Va lamiendo mi piel poro por poro,

es gigante, es duende y taumaturgo,

la síntesis de Dios y el Diablo ingenuo,

la manzana prohibida y el nirvana.

 

Saborea mis curvas, mis bahías,

me penetra voraz o enternecido,

nada  deja al azar, todo lo toma:

accidentes, lunares y hendiduras.

 

Se quedará conmigo para siempre,

lo sé, entonces yo decido cómo,

si será cicatriz o herida abierta,

si dormirá escondido entre homenajes,

debajo de los médanos dorados

donde supo anidar mi corazón.

 

© Luz Cassino

No hay comentarios:

Publicar un comentario