16/1/23

Poema de Estela Zanlungo

 


Cartografía 

 

¿Dónde querés los pinos?

preguntó mi papá.

Ella salió secándose las manos,

se quitó el delantal

y se paró a un costado de la puerta,

miró a lo lejos,

como un explorador que acaba de encontrar

su lugar en el mundo.

 

Mi madre entrecerró los ojos,

y por el tiempo que se quedó callada,

yo pensé en cosas de ellos que venían de antes.

 

El esperó apoyado en el mango de la pala,

tal vez sabiendo que en esas decisiones  

está el sostén de todo lo que sigue

Después ella hizo el gesto

de mostrar con el dedo

el lugar justo para erigir su bosque.

 

Cavó mi padre cinco pozos,

pasó la hora del almuerzo,

y cuando terminó, la luz bajaba del oeste

como barriendo la tierra removida.

 

Entonces ella hizo que no con la cabeza,

una vez sola,

definitiva

como la filigrana que al soltarse

desarma

el mecanismo de un reloj.

 

© Estela Zanlungo

Etiquetas:

6 comentarios:

Blogger Estela Zanlungo ha dicho...

Un gusto estar en tu blog, querido Gus!

16 de enero de 2023, 16:55  
Anonymous Lau Carnovale ha dicho...

Me conmueve tu poesía. Un abrazo, querida Estela.

21 de enero de 2023, 14:57  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Poesía a la sombra de un pino!Gracias!
Graciela Corrao

21 de enero de 2023, 16:51  
Anonymous Maria Mascheroni ha dicho...

Bello poema

21 de enero de 2023, 22:14  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Espectacular tu poema Estela. Me encantó. Silvia Durruty

28 de enero de 2023, 23:00  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Un poema muy visual, con un final
sorprendente que deja meditativo al lector.
Cariños
Juany Rojas

29 de enero de 2023, 20:20  

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