Poema de Claudia Bakún
Canción de
las cosas que crecen
Parecen
sueltas,
frágiles,
epidérmicas, inermes,
pero están
firmemente unidas
en la
raigambre del tiempo y del deseo.
Parecen
solas, descuidadas, torpes,
criadas en
la orfandad y el miedo,
pero son
esperanza molecular, atómica,
irradiándose
como el efecto expansivo
de una
bomba de buenas ideas
dejada al
azar por terroristas poéticos
habituados
al descuido como al padrenuestro.
Parecen
semillas dispersas en el desierto
por un dios
loco, ausente o ciego...
Y sin
embargo crecen,
como
margaritas embelesadas
en un
campo-trigal de feroces amarillos
y de verdes
intensos.
Crecen
azules, como magnolias furibundas,
como las
sonrisas de los niños que son felices
como dioses
de entrecasa,
como
caricias de recién casados.
Crecen de
la nada aparente de un deseo pequeño,
y se
conquistan como los países en la antigüedad,
con
guerreros y oropeles,
con sudor y
pasión y sin sentido.
Hay cosas
así, te lo aseguro:
Yo no sé
por qué crecen, pero crecen igual.
Parecen
inofensivas,
carecidas
de poder, débiles, insomnes...
pero gozan
de tan buena salud
que el
señor presidente de los poderosos del mundo
desesperado
como un crío y con la presión alta como un anciano
irá a
consultarlas cuando todo esté caído
todo,
menos ellas.
© Claudia Bakún
Etiquetas: Claudia Bakún
2 comentarios:
Bello! Muy buenas imágenes disparadas hacia múltiples sensaciones. Conmociona. Gracias! Alfredo Lemon desde Córdoba
Muchas gracias Alfredo! de corazón!
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