Marina Centeno recuerda a Julio Cortázar
ENCARGO
No me des
tregua, no me perdones nunca.
Hostígame
en la sangre, que cada cosa cruel sea tú que vuelves.
¡No me
dejes dormir, no me des paz!
Entonces
ganaré mi reino,
naceré
lentamente.
No me
pierdas como una música fácil, no seas caricia ni guante;
tállame
como un sílex, desespérame.
Guarda tu
amor humano, tu sonrisa, tu pelo. Dalos.
Ven a mí
con tu cólera seca de fósforos y escamas.
Grita.
Vomítame arena en la boca, rómpeme las fauces.
No me
importa ignorarte en pleno día,
saber que
juegas cara al sol y al hombre.
Compártelo.
Yo te pido
la cruel ceremonia del tajo,
lo que
nadie te pide: las espinas
hasta el
hueso. Arráncame esta cara infame,
oblígame a
gritar al fin mi verdadero nombre.
© Julio Cortázar
TREGUA
Hostígame
en la sangre,
que cada
cosa cruel sea tú que vuelves.
Julio
Cortázar
Por qué te
fuiste Cortázar
y me dejas
en medio del escozor y la desidia
en las
pulsaciones de la lámpara
cuando
vivir no magnifica
sino en
cambio atolondra
y me dejas
a cambio de tu broche
cincuenta
mil palabras
que si hago
poco o mucho
-o no hago
nada-
será porque
no tengo los ovarios
yuxtapuestos
en tu nombre
No me mires
así
Tú ya estás
muerto
© Marina Centeno
Etiquetas: Marina Centeno
2 comentarios:
Muchas gracias.
¡Felicidades!
Gracias por recordarlo a Cortazar
saludos afectuosos
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