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6/6/20

Claudia Tejeda recuerda a Héctor Miguel Ángeli





El pan y la madera

No pongas el mantel, niña.
Deja la mesa al desnudo.
Deja también el pan al desnudo.
Que se vean juntos
el pan y la madera.
El calor y la dicha
nacieron de esa cita.
Mi padre llevó las horas.
Mi madre llevó un cesto
trenzado con el cielo.
¡Cuántas veces el sol
entró con ellos!

No pongas el mantel, niña.
Ahora no, después sí,
cuando se duerma esta ráfaga
de retratos todavía dorados.
Mi padre me acercó al desvelo.
Mi madre me acercó a una fuente
con ángeles custodios.
Si hay fantasmas en las sillas
son espejos del silencio,
del silencio y nada más.
Pronto llegará el momento
de iluminar la comida.

No pongas el mantel.
Deja caer la ilusión
sobre el pan y la madera.

© Héctor Miguel Ángeli





No hay 

Cuesta llegar a fin de mes 
a fin de semana 
a fin del día. 
Qué hacer con el último gemido 
                                    de la heladera. 
Con este frío que atraviesa la puerta cerrada 
cuando los niños ya no piden 
porque intuyen la respuesta 
y juegan a negar 
la impaciencia del estómago. 

Alguien empuja un changuito de envoltorios 
las cáscaras del hambre. 

El pan es una urgencia 
que no pasa de moda.


© Claudia Tejeda

16 comentarios:

  1. Bellísimo poema de Héctor Miguel Angeli que halló eco y resonancia en tu pluma, Claudia. Bravo.

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  2. Bellísimos poemas, gracias. MARÍA CRISTINA DI LERNIA

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  3. Ay! Claudia! Esa maestría tuya de combinar palabras y realidad! Emotivo también el poema de Héctor Angeli.

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  4. Me dejó impotente tu poema, Claudia.

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  5. Qué bello poema el de Héctor Miguel Angeli, hace visible al lector esa mesa sin mantel en idilio con el pan, incluso la cálida luz dorada de la tarde, que también sugiere la presencia de los ausentes.
    Y el poema de Claudia, tan a tono con la contingencia.Dos poemas, uno con la presencia y el otro con la ausencia de aquel alimento que desata tantas emociones.
    Un abrzo
    Juany Rojas

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  6. Bellísimos poemas, y siempre el pan que nos lleva por distintas visiones y realidades.
    Gracias, Claudia.

    Abrazo
    Elisabet

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  7. Carmen Barrionuevo6 de junio de 2020, 19:58

    Qué buena conjunción... gracias, Claudia.

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  8. Dos versiones del pan y la tuya...la tuya que conmueve tanto!

    Besosss

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  9. Muy bellos los dos poemas. Lo cotidiano, las ausencias, las carencias como materia poética. Cuando el dolor acecha, ahí está la poesía tendiendo su puente de plata. Gracias!

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  10. El pan nuestro de cada día, que motivó a Angeli y Claudia. Excelentes.
    Anahí Duzevich Bezoz

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  11. El final impactante de tu poema Claudia, es una sentencia, un clamor: "El pan es una urgencia que no pasa de moda". Magnífico, además pintando la realidad de nuestro hoy circundante, se espeja con la visión que ofreció en su momento Héctor Miguel Angeli. Bendiciones para estas voces que con belleza, piden que el alimento cotidiano no le falte a la nadie! Alfredo Lemon

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  12. Ay! Intenso, inmenso como el pan nuestro de cada día como el deseo que a nadie falte. Te abrazo y felicitaciones.

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  13. El pan de cada dia con mucha intensidad en ambos poemas, el pan de la vida abrazo Claudia!!

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  14. Los dos entrelazados en versos. Qué maravilla!

    Lily Chavez

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  15. Mariasilvia Paschetta13 de junio de 2020, 23:10

    No tengo palabras para agradecer el aroma del pan que me ha tocado el alma...

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