Poema de Darío Oliva
Principio de incertidumbre
Crecen el desasosiego, las cicatrices, 
las
cuentas, el cabello, 
como crece el silencio adentro, 
y disminuye el hombre 
a
fría ecuación bajo tierra, 
y el poeta a una fracción 
de materia que se
disuelve.
Me desconcierta pensar en la ceniza, 
cuando
alcance en el viento 
un vuelo semejante al de la golondrina                                
                                  o el cuervo, 
y
pensar que sean las cenizas de mis huesos 
las que graznen ese desconcierto.
Es posible que me aferre al insomnio 
para
que no blanquee mis ojos 
la sobredosis del sueño, 
como también es posible 
que
Dios exista como incertidumbre.
© Darío Oliva
Etiquetas: Darío Oliva



2 comentarios:
admiro tu contundencia temática. placer leerte, daríp. susana zazzetti
Muy buen poema.
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