El aire
trae una calma de verano
Cuando en
el piletón del patio
no queda
ropa por lavar
con mi
hermana
nos
enjuagamos la piel
empapada en
sudor
enseguida
cantamos y reímos
no dejamos
que nadie
interrumpa
cruzamos
los dedos
nos miramos
los ombligos
enjabonados
a la cuenta
de tres
tomamos
aire y hundimos
la cabeza
entre la espuma
cerramos
los ojos
dentro de
una ola fabricada
con un
aplauso
bajo el
agua
el canto de
los canarios
nos
envuelve
en espiral
recorre el
cuerpo
de la
rabadilla a la coronilla
y saltamos
del agua
somos
delfines que chocan
las panzas
en el aire
caemos con
el lomo
sobre una
playa
de sábana
blanca que
como el
agua fresca
trae la
promesa del sueño
en el hueco
de la almohada
© Mario De Luca
Toda nostagia y ternura
ResponderEliminarFlora levi