Poema de Leny Pereiro

EL LUGAR CORRECTO

No hay lugar más amable para un manojo de penas,

que un corazón atento…

Pero el corazón del hombre se ha vuelto fugaz.

Intermitente.

Y parece encenderse sólo de a ratos.

Tal vez sea que el mundo está hecho de penumbras.

De trampas cómplices.

De escoria merodeando hambrienta de oportunidades sucias.

Y entonces,

de tanto en tanto,

lo mejor sea apagarse antes de morir latiendo a tiempo completo…

No sé.

Tal vez sea eso…

O quizás,

Sólo se trate de un pacto personal con la apatía.

Un ensayo de esperanza grosera.

Un intento mezquino de salvarse a solas.

Sin comprender que sería lo mismo que convertirnos en bufón de la rapiña…

Sí.

Tal vez sea eso.

O ambos.

O ninguno.

Y sólo se trate de mi propia pesadumbre buscando excusas.

Por eso, entonces,

Si así fuera,

Habré de ver cómo encenderlo siempre.

Acompasado.

Vital.

A tiempo completo.

Y convertido, definitivamente,

en el lugar más amable para un manojo de penas…

© Leny Pereiro