4/5/17

Texto de Víctor Hugo Valledor




Poseo un movimiento perecedero.
La idea del movimiento imperecedero bajo los párpados que mis ancestros levantaron página a página.
Los restos de un gran amor es apenas unas palabras confusas que no hablan, sino que emiten una confusa serie de signos guturales sin luz.
No hablan ni perduran. Buscan perderse en la marea que olvida.
La inmensa verdad de todas las verdades suele acompañar a las damas que planean su belleza con alas de seda, sobre el pedestal destruido del amor.
La inmensidad no se planifica. Lo que nació brevedad no llega a ser desierto de semillas en frotación.


© Víctor Hugo Valledor

3 comentarios:

Anonymous MARIA LUISA MARQUEZ ha dicho...

LA INMENSIDAD NO SE PLANIFICA, PERO DE UN MODO HA CONSTRUÍDO EL POEMA , UN SALUDO DE MARIA LUISA MARQUEZ

9 de mayo de 2017, 21:49  
Blogger María Sonia Quevedo Hoyos ha dicho...

Están sus palabras cargadas de silencio, algo muy parecido a la nada, al no ser...
Lo saludo.

11 de mayo de 2017, 17:48  
Anonymous Carmen Barrionuevo ha dicho...

Me asombrás en cada poema, en cada relato. Gracias Víctor!

14 de mayo de 2017, 14:17  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio