24/1/16

Poema de Leonor Mauvecin


Y  ha leído el amor en las hojas del otoño
como un cazador furtivo.
En el revés, lo ha leído
en su breve nervadura donde la vida vuelve
Y en el sabor del carozo
en el último y  primer mordisco de la fruta.
En el jardín, exilado paraíso
                                    con serpientes
                                    y árboles sagrados
                                    y frutos prohibidos
que él devora
                      -sin culpas-


en los linderos del verano.



© Leonor Mauvecin

4 comentarios:

Blogger sacanueces ha dicho...

leonor, cuanta belleza!!! me gusta, llena de encantamiento!!! gracias por compartirlo. un beso y abrazo enorme!!!! se te quiere mucho!!!! francisco

26 de enero de 2016, 19:54  
Blogger Noemí Correa Olivé ha dicho...

¡Bello poema, felicitaciones!!

27 de enero de 2016, 0:15  
Anonymous Milagros Rodríguez ha dicho...

Bello poema!!!

27 de enero de 2016, 21:24  
Blogger WALTER MONDRAGÓN ha dicho...


este poema tiene luz tiene encantamiento, tiene ángel, y es nuevo en sus imágenes, ese recrear la idea de la hoja como las lineas del destino es como una mano abierta, me suscitó es francamente grato y nuevo.
muy bien
Walter

28 de febrero de 2016, 13:58  

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