18/1/15

Poema de Beatriz Arias



Desde mi corazón se pasea la soledad,
solamente el reloj deshace los silencios
con su cuerpo de feroz monotonía.
Hacia atrás marcha la juventud
y enlaza los niños de mi sangre.
Sobre mis hombros cae un pesado crepúsculo...
las manos abiertas
miden los cuentos del invierno
y el viento regresa
de un sueño sin edades.


© Beatriz Arias

3 comentarios:

Anonymous jorgepablomoreno. ha dicho...

Soberbio poema, inmortal en su hondura y su belleza. Un poema para releerlo y reencontrarse con el.

jorge pablo moreno.

19 de enero de 2015, 5:41  
Anonymous Anónimo ha dicho...

muy desde adentro, nace este poema absolutamente delicado. susana zazzetti

20 de enero de 2015, 9:37  
Anonymous Anónimo ha dicho...



Tierno, sutil y melancólico.

Bello poema.

Abrazo.

Alicia Márquez

23 de enero de 2015, 19:32  

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