17/9/13

Poema de María Chapp


O J O     P E R E G R I N O


el parpadeo purifica
limpia de pasados
guía a lo más íntimo
donde el huésped
    aguarda
en la alta frente
        un manantial

sudores     confusión
inquietud de los cuerpos
el parpadeo purifica
miedos     heridas
tormentos
         de la especie

viaja la conciencia
      ojo peregrino
hasta que soporte


                    la luz


© María Chapp

15 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

lo muy bueno de leerte, maría, además de disfrutar de tu talento, es que tu palabra contagia con su transparencia, su luz. un gran abrazo. susana zazzetti.

17 de septiembre de 2013, 20:13  
Anonymous MILAGROS RODRÍGUEZ ha dicho...

María! Cuanto más que un ojo es ese ojo! sobre todo "en la alta frente" Bravo!!!

17 de septiembre de 2013, 22:15  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Y Maria Chapp, a partir del movimiento automático de los párpados, del cual casi no tenemos conciencia, enarbola un poema maravilloso, profundo y pleno de sabiduría, como su mirada mágica sobre el universo.
Felicitaciones María
Ignacio

(Este comentario por algún error
salió repetido entre los comentarios a mi poema)

18 de septiembre de 2013, 8:27  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Buen texto, María, que ayuda a descubrir rincones...

Claudio Simiz

18 de septiembre de 2013, 11:35  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Siempre es hermoso leerte, tus versos son como agua donde mirarse. Beso preciosa

Lily Chavez

19 de septiembre de 2013, 18:23  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Siempre es hermoso leerte, tus versos son como agua donde mirarse. Beso preciosa

Lily Chavez

19 de septiembre de 2013, 18:23  
Anonymous vuelo de noche ha dicho...

ese ojo, María, cuántas cosas vio!! almacén de visiones indiscriminadas, el parpadeo protege de la desesperanza, borra lo que no debimos ver, limpia lo residual negativo y lo devuelve al ojo vagamundo al asombro primigenio. bello, hondo, esencial, gracias por este poema. Abrazos de Marta Ortiz

20 de septiembre de 2013, 20:12  
Blogger Leonor Mauvecin ha dicho...

Ese ojo que mira es mirado y en ese mirar nos sorprendemos a nosotros mismos . Bello poema Gracias

20 de septiembre de 2013, 20:44  
Blogger Adriana ha dicho...

Bello poema. Ese ojo peregrino de la sabiduría y la elevación espiritual, que -por ser humano- también tiene su limitación: "hasta que soporte la luz". Hermoso. Un abrazo. Adriana Maggio

20 de septiembre de 2013, 23:16  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Es verdad el ojo por ser humano tiene limitaciones pero igual cuánto encierra de profundo misterio en su interior
abrazo Maria

maria elena tolosa

21 de septiembre de 2013, 11:55  
Anonymous Anónimo ha dicho...

un ojo, que apunta como si fuera a disparar, y vé, y presiente y es certero.
bravo,saludos
Anahí Duzevich Bezoz

21 de septiembre de 2013, 17:57  
Blogger Anamaria Mayol ha dicho...

Profundo original y muy bueno Un placer leerte María

24 de septiembre de 2013, 17:49  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Querida María,
Como ya dijera en el comentario que hice de tu libro "El Ojo Peregrino", transcribo un fragmento del mismo:...
"Una mirada abarcadora nutre el universo poético de la autora. Como una pasarela que emerge desde los ojos, la poeta nos conduce a través del parpadeo de mundos paralelos, que toman forma desde lo visceral y se proyectan hacia la vastedad del cosmos..."
Un gran abrazo y Felicitaciones!

Elisa Dejistani

26 de septiembre de 2013, 0:23  
Blogger Isabel ha dicho...

El poema es excelente y claro, al menos para mi lectuia Es la viviencia de estar viajando y, como en otras ocasiones, has tenido la
buena idea de poner la palabra "húesped" que sugiere al que habita en nosotros o al que nosotros habitamos Aquí parecería la vida, la perseverante mirada hacia el sitio amoroso.
El principio, ese parpadeo en una frase por demás poética, sin acumular palabra, despojo de dolor y resentimientos hasta la más potente luminosidadl.

. ¨Trayecto hasta que el ojo, que ha visto y leído los males de los seres humanos,
que los ha soportado , podrá soportar la contem
plación de la máxima luz
La que nos remite
a citas de los Salmos. "cuando llegaré a contemplar la luz de Tu Rostro" Y David lo decía de la faz de el Dios invisible",
inconcebible luz espiritual.
lUn beso enorme.
Isabel Llorca Bosco

29 de septiembre de 2013, 19:04  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Amigos: gracias por los profundos, certeros comentarios, gracias Gus por esta casa de poesía y amistad, los quiero mucho!!! María Chapp

29 de septiembre de 2013, 20:23  

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