11/9/13

Poema de Ana María Manno

  

la  voz responde
                     Ciega
                                   Ciega
 enciende una luz habla esclava
bebe agua de lágrimas
                                   mira el ramo de rosas ahí ahí
                                             
déjame entrar
                      hay un muerto
sos mi muertito
             algo mío se desprende

esclava clávale las uñas hay rastros de piel trocitos de su cuerpo                        
puro jugo de dolor no mires …

yo lo decía: en cualquier momento aparece muerto

habla esclava 
eso tiene nombre    cadáver
                                 escupe esclava tironea de su mortaja
el fino tul
el cajoncito deslumbra
sirve de espejo
             se deshace mi forma de mirar 

no estoy sola te sigo detrás de una o dos rosas
                                                                 no hablo 
sigo el cortejo y pienso
                                  era la última vez
abriste una puerta no la puerta
nos separaba una reja
te alcancé una caja de pastillas
                                        vos mirabas sin mirar   casi sin estar
te morías no había tiempo si lo pienso enmudezco 

se acortaba el tiempo
                           la gente se detenía
y yo sin mirar más que ese cajón de madera crujiente
escucha esclava
               algo no responde

déjame juntar tus huesos como florcitas en mi jardín


© Ana María Manno

10 comentarios:

Blogger Rolando Revagliatti ha dicho...

¿Puedo decirte que me atrae mucho el hálito? Supongo que algún "mirar" podría sustituirse, y alguna otra cosilla. Pero a "abriste una puerta no la puerta" o "no estoy sola te sigo detrás de una o dos rosas", por ejemplo, no accede cualquiera. Sí, el hálito me pudo, Ana María Manno.



www.about.me/rrevagliatti

*

11 de septiembre de 2013, 18:40  
Anonymous Anónimo ha dicho...

gracias Rolando por la lectura, ya ves algo nos reúne!!!!
AnaMariaManno

12 de septiembre de 2013, 14:50  
Anonymous Beatriz Minichillo ha dicho...

Extraño y dramático poema, con una belleza casi salvaje

13 de septiembre de 2013, 19:29  
Blogger Nerina Thomas ha dicho...

Fuerte, - déjame juntar tus huesos como flor citas en mi jardín -
Besos

14 de septiembre de 2013, 0:17  
Blogger Nerina Thomas ha dicho...

Fuerte, - déjame juntar tus huesos como flor citas en mi jardín -
Besos

14 de septiembre de 2013, 0:17  
Blogger graciela perosio ha dicho...

coincido bastante con Rolando, ana. También me gusta mucho el sustantivo"cajoncito".Ayuda al hálito siniestro.

14 de septiembre de 2013, 15:44  
Anonymous jennie ha dicho...

Me fascina tu poema!!!! En el final
me parece fantástica la comparación de los huesos
con las florecitas del jardín,
me tomó por sorpresa!!!
Aplausos y bises.
Un abrazo

15 de septiembre de 2013, 23:25  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Qué gran poema Ani!
...fuerza, belleza, hondura florecen con un ritmo poético que me encanta...

Besotes primaverales amiguita
Montse

20 de septiembre de 2013, 20:58  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Poema que me conmovió y me inquietó. Tiene metáforas bellísimas y una fuerza
arrolladora como la de una gran tormenta. Aplaudo este texto salvaje.

Jorge Luis Estrella

21 de septiembre de 2013, 4:13  
Blogger Unknown ha dicho...

Tremendo, inquietante. Me gustó. La voz con que decís me gustó mucho. Saludos.

22 de septiembre de 2013, 12:00  

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