27/8/13

Poema de Bibi Albert


PARQUECIDA


Todos los parques son tristes.
Pero el de Chacarita
es el más triste de todos.
Nunca hay chicos, ni con sol,
porque a ninguna madre se le ocurriría.

Pero encima hoy llueve.
No quiero caer en el lugar común
pero estruja ver llorar a los árboles.
Que acá son diferentes: el cuerpo resignado,
encorvada la espalda de los troncos,
artríticos de tanto reprimir vehemencias,
sin hombros que resistan lo que los hombres cargan
en sus manos de luto.

Tal vez en sueños
tiren pelotas contra el frontón del miedo
-ese NO interminable de cemento-
y se sientan floridos y rotundos,
y llenen el silencio de zumbidos.

Ni el colectivo para, contrafóbicamente.

Y yo sigo esperando, anegada, aterida,
tan invisible como los de adentro,
sin decidirme a rebrotar en canas verdes
y abrir los dedos de los pies
para que jueguen a ser rayos
de sol bajo la tierra de este parque,
alumbrando la mina de mis muertos.


© Bibi Albert

8 comentarios:

Anonymous MILAGROS RODRÍGUEZ ha dicho...

Hay una pausa una espera en un cuadro lleno de imágenes de orfandad, sentí caer sobre mi tu misma lluvia...

28 de agosto de 2013, 20:45  
Blogger Adriana ha dicho...

Muy bello poema, Bibi. Triste y melancólico, pero salpicado de imágenes muy poéticas y hasta llenas de humor a pesar del tenor del texto (p. ej. "rebrotar en canas verdes". Me gustó mucho y me trasladó al paisaje conocido de ese lugar que también guarda a mis "invisibles". Un beso. Adriana Maggio

31 de agosto de 2013, 14:52  
Anonymous Anónimo ha dicho...




Triste, sí.
Y verdadero.
Y llueve, también, como a Milagros.

Un abrazo,

Alicia Márquez

31 de agosto de 2013, 16:53  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Un estado de tristeza bien reflejado en ese parque, uno en particular, porque no todos son tristes, es tu tristeza plasmada plena de imágenes
en el transcurso del tiempo.
lograste que al cerrar los ojos viera la lluvia.
Abrazos
Anahí Duzevich Bezoz

31 de agosto de 2013, 16:55  
Anonymous ciela asad ha dicho...

bibi, que linda imagen esa de abrir los dedos de los pies al so!, y tan contrapuesta a esa de ver llorar los árboles...uf, me gustó mucho.gracias.ciela

31 de agosto de 2013, 19:12  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Todo es real y los árboles se mimetizan con el paredón que guarda la muerte. un saludo de Maria Luisa Marquez

31 de agosto de 2013, 20:29  
Anonymous Anónimo ha dicho...

¡Una belleza de imágenes y personificaciones que conjura a la misma muerte, Bibi!
Aplausos, bises y besos
María Rosa León

1 de septiembre de 2013, 1:39  
Blogger Teresa Gerez ha dicho...

que en esta primavera, broten tus "canas verdes" en bellos poemas como éste que de la muerte hizo un canto. Abrazote

13 de septiembre de 2013, 12:42  

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