Poema de Milagros Rodríguez

La ventana  II 

Miras la ventana desde ese lugar callado

Absorbes el frío del vidrio, solo porque el verde de los árboles te llama

¡Cuánta conmoción!

Si la mirada fuera una aguja, rebotaría sobre la transparencia

pero el ojo, convierte  su espacio en el propio cristal

y lo que ve, es solo suyo

Suyo el instante único, suya la mirada que se apropia del otro lado

Entonces algo ocurre:

                  Un ojo se queda adentro y otro está afuera

otro que lleva tu nombre y ahora te desconoce

Porque no eres mas que fragmentos, ausencia de una presencia disgregada

un caos que te  librera del cuerpo, la sensación

de ser  flor que se ha caído del tallo 

              Los gestos gravitan sobre si mismos

              Lo incompleto debe ser completado 

 Los árboles se espejan contra la ventana, te ves del otro lado pero estas aquí,  ensombrecido

Quieres acordarte del viento dormido  junto a las ramas

de esa flor deliciosa amanecida en sabia

de la lengua húmeda que lame la tierra

de cómo los pájaros ya dejaron sus jaulas  

Estás aquí, con los ojos cerrados, mitad hombre- mitad árbol. 

Te volverá la mirada envuelta en sueño    

 y serás un hombre completo… sólo cuando abras la ventana. 

Ahora estás pendiente de ti.                 

                                                                  

©  Milagros Rodríguez