27/1/13

Poema de Liliana Díaz Mindurry

                  




En algún momento alguien contará del bailarín muerto delante de los pequeños mundos de Kandinsky,
del disparo,
alguien contará con frases, dedos, uñas de frases,
dedos, uñas de palabras, esquirlas, sílabas, balbuceos, dedos, uñas de sílabas, /esquirlas de balbuceos,
alguien hará ruido con la boca, pólvora de ruido, esquirlas de ruido,
alguien moverá la mandíbula,
alguien hará gestos con los dientes,
alguien moverá la cara
                                               y no será cierto

Porque nunca es eso. 

Y no se trata de miedo,
ni dedos, uñas de miedo, esquirlas, pólvora de miedo
gestos de miedo. 

            Cuando llega la muerte
despacito,
no hay ruidos,
no hay silencio.

© Liliana Díaz Mindurry

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6 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Liliana: en tu poema hay una revelación muy sutil y dolorosa, y me gusta que este dicha con tanta sencillez: "cuando llega la muerte, no hay ruidos ni silencios"

Un abrazo

Carmen Amato

27 de enero de 2013, 16:28  
Blogger Gastón Sequeira ha dicho...

Muy buen poema. Un abrazo. Gastón Sequeira

29 de enero de 2013, 11:34  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Texto que quita el aliento, hasta el final súbito e inevitable. Me gusta.

Claudio Simiz

29 de enero de 2013, 19:16  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Admiradora de tu escritura me subo al dolor descripto en este poema que estremece
Graciela Licciardi

2 de febrero de 2013, 17:59  
Anonymous Pauli ha dicho...

Excelente. Me fascinaron las imágenes que construíste con la palabra "uñas". Tus poemas son como un puñetazo.

7 de febrero de 2013, 20:51  
Anonymous Anónimo ha dicho...

David A. Sorbille dijo...
Genial poema, Liliana! Un abrazo

14 de febrero de 2013, 23:11  

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