Poema de David Rosario Sorbille
Desde mi refugio entrañable
Desde mi refugio entrañable
te invoco mujer mía
de todas las horas.
Mi fe tiene su razón
en tu memoria.
Tu Dios es mi Dios, y ruego
por la resignación frente a tu partida.
Sin embargo, todo me resulta extraño,
ajeno, distante, y sólo me interesa
detenerme en la luz de tu imagen.
© David Rosario Sorbille
6 comentarios:
Ese querer retener lo in retenible. Bello poema, David, triste y bello.
Besosssssssss
Bellísimo David, qué amor. Gracias por compartirlo. un beso. Sonia Del Papa Ferraro.
David: un poema conmovedor, bello y muy profundo!
Un cariño enorme.
Mirna Celis.
felicitaciones David, hermoso
saludos
Anahí Duzevich Bezoz
Excelente homenaje al Amor...
Nadie puede vencerlo.
Gracias por compartilo.
Un abrazo.
Dragontesa Leuzzi.
David A. Sorbille dijo...
Gracias a cada una de Ustedes por esas palabras tan cálidas que mi Padre, el autor de esos versos, les agradecerá con el corazón!
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio