Poema de Teresa Palazzo Conti
“…
no basta un solo cuerpo para albergar sus noches,
quedan estrellas fuera de la sangre”
Eugenio Montejo
EL REFUGIO
Con la voz de la sangre, con el pelo confuso,
entre las tristes cosas de las mañanas tristes,
un calendario corre
sobre las máscaras aparentes.
Las copas y los besos
se tendieron al sol.
Busqué en la tierra negra,
en las estrellas desoladas;
desenredé las crines de otros alazanes
que en el viento relinchan;
que galopan la pena categórica
sobre la nube fértil.
Los surcos y los tordos
se tumban
en los verdes ojos de la hierba verde,
y yo, muñeca articulada,
muevo las manos,
mariposas de tedio;
lavo mis piernas enrojecidas,
y hurgo en casilleros amarillos
un atisbo del árbol
que guardó para mí
el columpio y la sombra,
el abrigo y la savia espontánea en mis preguntas.
© Teresa Palazzo Conti
Etiquetas: Teresa Palazzo Conti
9 comentarios:
Me gusta mucho tu poema Refugio, Teresa. Haces un juego que surca senderos debajo del consciente, también se evidencia nostalgia. Para ese juego, manejas imágenes (metafóricas) que son visionarias y también "visiones" en sus capas de sentido( al decir de Bousogno). Qué buen empleo de las reiteraciones en esos juegos. En la parte final, está algo de la inocencia, un ir a la infancia y traerla. El último verso cierra magnífico todo el poema Refugio. Hay un verbo que quizás sea error de tipeo: mueve, en lugar de muevo? Felicitaciones poeta por este texto!
El comentario anterior corresponde a Cecilia Glanzmann ( disculpas, pues había marcado "anónimo"
muy bello y elocuente. me encantó mucho el final. suana zazzetti
Bellísimo poema. Bea Belfiore
Plenitus de imagenes, muy bueno.
Anahi Duzevich Bezoz
Saber que las palabras llegan al corazón de alguien, es luz y regocijo. Gracias
Muy agradecida.
Agradezco la lectura y el comentario.
La cercanía entre escritor y lector, reconforta. Gracias.
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio