MEMÉ
¿De qué oscuridades
saliste sumergida?
Eras la luz descarrilada,
el viento polvo de los caminos.
No te vi partir.
Solamente un día quedaste lejos,
dormida en el azul.
Y tuve que dejarte ahí.
En tu cama que volaba.
Pero ya no estabas.
Pero ya te habías ido.
Y esa tarde
sólo
hubo
silencio.
© Carolina Kibudi
No hay comentarios:
Publicar un comentario