Poema de Aníbal Costilla
BLANCO DISCO DE LA LUNA
Con estas manos que produjeron el pan
compartido en otras manos,
un regalo destinado a todos
y a nadie,
tracé un mapa para regresar
a la madrugada que aún latía en mi boca.
Sólo el disco blanco de la luna,
como un cartón iluminado
desde abajo, me guio
por entre los segmentos impacientes
de los caminos.
Después que el alba
pudo volver a respirar,
el sol enmudeció el ladrido
de los perros,
el asfalto rugió
a la distancia.
Asomado al vértigo del día
me arrojé al camino,
con nada en las manos,
los ojos radiantes.
© Aníbal Costilla
Etiquetas: Aníbal Costilla
8 comentarios:
Hermoso poema.. bellas imágenes.. ..asomado al vértigo del día/me arroje al camino. ❤🦋
La luna, el sol, el ladrdrido de los perros, los ojos radiantes. Muy bueno Anibal.
Héctor G. Ghidini
La luna, el sol, el ladrdrido de los perros, los ojos radiantes. Muy bueno Anibal.
Héctor G. Ghidini
Preciosura de poema iluminado por la luna. Todo tiene vida para el poeta que mira y siente. Abrazo grande.
Felicito a Gus por encontrar las imágenes tal cual las evoca el poema
La madrugada que aún latía en mi boca, qué lindo verso Aníbal y muy hermosas imágenes. Gracias por compartir tu poema.
Lily Chavez
Querido poeta Aníbal Costilla, te conocí hace años en el Festival de Monte Hermoso, y ya me deslumbró tu poesía, sencilla, escueta, con bellísimas imágenes. Te felicito nuevamente y te abrazo, Elena S. Eyheremendy
Siempre es un placer leer a Aníbal
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