Tu rastro
Se me hace largo el tiempo de esperarte.
No te conozco, pero ¡qué noche aquella!
No sé cómo sos con paraguas
con sombrero, con miedo, engripado,
con el pelo largo, con barba de dos días,
con cara de pedir perdón, de perdonar, de circunstancia
no sé cómo te verías caminando por mi barrio,
comprando pan, decidiendo el vino,
a la sombra de mi árbol, al lado de mis hijos
no sé de qué te reís y casi no recuerdo tu boca
no sé cómo es tu cara en el cine
si te gusta el cine
qué ves en el cine
ni tu cara de decir que no, de maldecir, de dar limosna,
ni las caras de poner en cada caso.
No sé si te gusta como a mí la lluvia, Chaplín,
los higos secos, las fotos viejas,
los techos desde arriba
las manifestaciones desde adentro.
No sé lo que te pone triste o te mata de risa
lo que guardás en los cajones
lo que no querés prestar a nadie
lo que nadie te quiso dar.
No puedo adivinar tus pasos
ni presentir tu llegada,
no sé si te amo o si vos
no sé cómo mentís
ni qué te enfurece más
no sé casi nada de vos
no tengo la menor idea
pero se me ha hecho largo
este largo tiempo
de haberte perdido el rastro.
© Irene Scalabrelli
Irene, muy hermoso. Gracias!
ResponderEliminarExcelente! Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarMut bueno tu poema.
ResponderEliminarAna Romano.