Texto de Francisco José Malvárez

  

Llueve como llueve acá ( de los estados de conciencia) 

 

   llueve, llueve como llueve acá, de esa forma casi indecisa, un chaparrón, una garúa o apenas un sudor de nube, y de nuevo un chaparrón más enculado y así jodiendo como se le vienen ganas, y por el medio se va colando el aire frío, también jodido, también indeciso e incómodo.

   bueno, llueve como llueve acá, jodiendo, y nosotros adentro escondiéndonos de la mojadura como si fuéramos de lata y nos oxidáramos, pero es así, acá es así, mojarse es molesto, más si el frío empuja también. y yo más adentro más adentro de mí,  pensando en la mojadura, en la mojadura sobre la espalda, y pensaba sobre la espalda más allá de toda agua, de toda cosa. la espalda, ay! con la espalda que siempre ve pasado y soporta su peso abismal, por lo menos la mía, de otros no sé a lo mejor también. bueno vuelvo a la espalda, la mía por supuesto, y al pensarla pienso en ese espacio mío, enteramente mío, y que está y queda atrás, y me lleva a pensar en el resto de mí, lo que va adelante de ella, el frente, eso que vemos al reflejarnos en un espejo, lo de adelante, lo que ve el futuro, el que lo crea. y entonces pienso que hay entre uno y otro espacio mío, entre el atrás y el adelante,  entre el que mira el pasado y el que ve y crea el futuro, que sería el que está en el medio, el presente constante. el único presente que se formaría entre un pasado y un futuro, el que se va creando quiera o no, ambos inevitablemente.

   bien,ahora, cuánto de mí hay en cada espacio? obviamente pareciera que soy una unidad, lo que parece que mis tres espacios que estarían conformando mi unidad experimentan a la vez los fenómenos del tiempo, pasado, presente y futuro, pero siento que no es tan así. creo, que solo cuando se duerme, que a lo mejor ahí en ese segmento no sucede el tiempo y uno es realmente esa unidad que suponemos,  espalda, medio y frente fusionados.

   fuera del fenómeno del sueño lo cotidiano es una lucha irracional donde el pobre cerebro trata, desde lo racional, de unificar toda emoción o sensación que se haya producido en el tiempo que fuere, sin pretender disociar (qué es lo que sucede) la experiencia temporal, de la espalda medio y frente, tomando todo como un experiencia de la unidad aunque no fuere así, mi cerebro lo padece y me doy cuenta. al darme cuenta pretendo identificar más claramente, más sutilmente qué parte de mí está transmitiendo tal o cuál emoción o sensación. ahora, bien, qué medida física corresponde a cada espacio, espalda, medio y frente? por ejemplo, en qué medida física se sucede el presente? divido longitudinalmente desde arriba hacia abajo mi cuerpo en tres y atribuyo a cada segmento un rótulo, 10 cm al pasado, la espalda, y 10 cm al medio y 10 cm al futuro, el frente, claro, si mi cuerpo tendría un espesor de 30 cm. diría, entonces, que mis emociones o sensaciones presentes surgirían de esos 10 cm que quedan entre el atrás y el adelante, lo cual me complica identificar con algún tipo de certeza, lo que aún no puedo, que no quiere decir que no se pueda. veré más adelante.

   Ufa! ahí estoy bastante complicado, mi pobre cerebro se ha perturbado, poco y nada puedo hacer…

   llueve endemoniadamente, llueve y estamos adentro y yo más adentro y perturbado, como perturba la lluvia, la lluvia de acá, de acá, del rancho cuando llueve.

 

© Francisco José Malvárez