Poema de María Soledad Gutierrez Eguía
VISTIENDO LA MESA
La casa del tiempo demasiado hermosa.
Yo exhausta. Convergen el pesar del día, el
hueco humoso vistiendo la mesa.
Ventisca silenciosa, el hambre, cumple su
condición.
Nosotros, lo sé, nuestra creación; estacas
plantadas.
Yo digo, demasiado sola.
© María Soledad
Gutierrez Eguía
Etiquetas: María Soledad Gutierrez Eguía
10 comentarios:
Gracias Gus. Beso grande.
Tremendo poemas. Me quedo un rato más. Gracias
María Soledad, tremendo remate que implosiona todo el idilio del poema. Aunque cuando decís "demasiado hermosa" (la casa) ya anunciabas un malestar. Abrazo, Teresa
Un poema bello y fuerte. El demasiado que dice tanto.
Gracias a vos por tu comentario, Andre Far Fer.
Mi sentido agradecimiento Teresa. Beso.
Susana, agradezco tu devolución.
Cariños.
Bello y profundo en su expresión trágica , como suele ser la realidad! Bravo Sole querida
¡Gracias anónimo!
Bueno bueno Soledad!
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