El té verde que compramos
en el barrio chino es delicioso.
No tiene ningún agregado
ni pétalos ni trozos de frutas
es un simple y delicioso té verde.
El catálogo dice que es de Yunan
y la foto muestra suaves
ondulaciones verdes. Leo Yunan
y es todo misterio. Lo repito
mientras saboreo y espero
que sean las seis de este viernes y entres
por esa despintada puerta roja.
© Horacio Maez
Conozco ese poema. Es de una delicadeza y recato maravillosos.
ResponderEliminarBellísimo!
ResponderEliminarprecioso poema
ResponderEliminarHermoso poema!
ResponderEliminarMuy buena descripción como el sentir.
ResponderEliminarmuy buen poema , sencillo , buena descripción felicitaciones
ResponderEliminarDesde la historia del té hasta la nostalgia por el ser amado... muy lindo...
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