Último invierno en Polonia
Eran seis o siete cadáveres balanceándose,
colgando silenciosos de un largo travesaño.
En la foto los mece un viento helado.
Al pie, en idish, una leyenda que olvidé
y que ahora traduzco:
Estos son los nombres
de los muertos sin patria,
de los muertos sin rostro,
de los muertos sin madre,
de los muertos que no fueron sumados
a la cuenta final
en el último invierno de Polonia.
© Gerardo Lewin
Muy buena tu descripción. Espeluznante! Alfredo Lemon
ResponderEliminarOhhhh cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia. Inmneso poema. El mismo sufrimiento y la misma locura. 😪❤🦋
ResponderEliminarSoy graciela Ballesteros
ResponderEliminarlos que no terminaremos de enterrar nunca. tremendo poema. abrazo. susana zazzetti.
ResponderEliminarTermedo. Con la terrible hermosura de la poesía necesaria.
ResponderEliminarVerónica M. Capellino Rando