Las posibilidades de movimiento son:
- El ascenso:
un salto al vacío
no habría que mirar mucho tiempo
el precipicio
ni medir las consecuencias
de caer
imaginar que el pie
ya está del otro lado.
El descenso:
amar sobre todo la noche
esperar como un animal
agazapado
que la presa se deje oír.
- El vaivén de un columpio:
entre el cielo y la tierra
cantar
con la música
de las cadenas
oxidadas.
© Bárbara Alí
Puro lirismo. Me encantó. Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarQUÉ SUCESIÓN de tiempos, asenso, descenso...qué construcción, me gustó mucho, Bárbara, ese ida y vuelta del columpio, muy ingenioso
ResponderEliminarSEBASTIÁN JORGI
Siempre me encanta la poesía en movimiento. La cadencia permanente
ResponderEliminarHermoso poema que mueve.
ResponderEliminarhermoso poema! muy expresivo! Gracias!
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