DISCURSO SOBRE ISABELLE HUPPERT
Esta actriz francesa hace una mueca asaz
ambigua, que he detectado en varias películas. Me encanta su actuación, me
encantan los personajes que interpreta. Comparto esta fascinación con un amigo.
En cuanto a mí, el número dos parece
ejercer una atracción inexplicable. Por ejemplo: distingo dos clases de
instintos. Uno está en nosotros en cuanto hombres y es puramente intelectual.
El otro está en nosotros en cuanto animales. El alma siempre piensa, piensa
siempre.
La razón por la cual creo que el alma
piensa siempre es la misma que me hace creer que la luz luce siempre. Aunque no
haya ojos que la miren. Cuando voy al cinematógrafo, las luces se apagan.
Aparece la actriz francesa. La luz luce siempre. ¿Ves?
Busco los signos que usamos para demostrar
nuestras pasiones. Todas las noches tenemos mil pensamientos.
© Fabián O. Iriarte
El alma siempre piensa, piensa siempre... Qué buena la luz de tu poema Fabián, acompañando la belleza eterna de esta gran actriz. Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarEl alma piensa...qué bueno! Abrazo. Inés Legarreta
ResponderEliminar¡Gracias, Alfredo Lemon! - Fabián
ResponderEliminarConocía este poema de Fabián. Me encanta. Me encanta. Marcela Meroni
ResponderEliminarMuy sutil prosa Fabian
ResponderEliminarIsabelle gran actriz. Excelente Retrato Fabián. Jorgi...
ResponderEliminar¡Gracias, Marcela y Sebastián! - Fabián
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