Poema de Mercedes Venturino

 

 ¿Qué hacer?

 

¿Qué hacer con las persianas, con las plantas

con el mundo que te sobrevive pero deja

de ser el mundo?

¿Qué hacer con todo lo que insiste en su tallo,

Como una amapola en su ímpetu de blancura?

¿Qué hacer con el reloj, que se llevó tu tiempo,

y el tocadiscos que espera que lo liberen

de tu compás de viernes y de tango?

¿Dónde guarda mi memoria

el último rayo de sol que vieron los ojos

de mi abuelo?

¿En qué lugar de mi respiración contenida

quedan esos latidos de mi viejo

cuando el medico aseguro que eran los últimos?

¿Dónde queda el último gesto que más tarde

-Mucho más tarde-

recordamos y reconocemos

con el signo de la despedida?

La última vez que amamos aquel cuerpo, que ya no era amor

La última escondida del verano de fuimos niños

La última vez que mi hijo trepó a su triciclo

La última vez que mi hija acunó  su muñeca

La última vez que mi madre me guardo en su regazo

y en su pecho

y yo seguía oliendo el color rosa de la crema hinds

-porque el color rosa tiene olor, y es ese-

No sé qué nombre, qué palabra, qué mística bordarle a las despedidas

Lo único que sé,

es que si por un solo instante pudiera hablar,

y mis muertos me escuchen,

yo les diría:

anda tranquilo,

prometo honrar la vida aun sin tener más

tu corazón caliente a mi lado

 

© Mercedes Venturino