La medida de mi tiempo
Hay momentos en que mi cuerpo me parece
como una casa abandonada
Estela Figueroa
Es un tamboril la lluvia sobre los techos.
Todos duermen en la casa
menos yo.
Reviso varias veces cielorrasos y rincones.
Les temo a las goteras
a la entrada de agua bajo la puerta.
Mamá está muy joven,
Pone baldes y ollas,
pasa el trapo
con la misma obsesión.
secate, ma
tenés los pies mojados.
Tantos años sin hablar.
Hoy nos encontramos
en la casa vieja.
© Margarita Presas
Bienvenida Marga a éste sitio que pretende difundir a poetas contemporáneas/os. Abz, Gus.
ResponderEliminarBienvenida Margarita! Gracias por tu poesía!
ResponderEliminarBelleza de poema Margarita! Gracias Gustavo ❤️
ResponderEliminarGracias, Marisa.
EliminarGracias Margarita por tu bella poesía!
ResponderEliminarMuchas gracias, Gustavo, por invitarme a participar de este sitio.
ResponderEliminarMucha emoción al leerte Margarita. Felicidad asegurada en este espacio de inclusión, diversidad y respeto. Bienvenida poeta. ❤️🦋 Graciela Ballesteros
ResponderEliminarPrecioso, Marga querida 🧡. Soy Caro Bugnone
ResponderEliminarBello poema.
ResponderEliminarMati López
Gran poema!
ResponderEliminarBesossss
Ese anónimo sin nombre soy yo. Disculpas.Griselda Rulfo.
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