La luz en la ventana es poca,
su propia sombra, a veces,
pasa entre las manos
y la deja barriendo con los ojos cerrados.
La penumbra acompaña la intimidad
de estar con los que fueron, fuimos,
en calles, bodegones, labios que aún
humedecen.
Y a veces, muchas veces,
para no despoblarnos de aquello que
quisimos
nos quedamos solos.
© José Antonio Cedrón
Excelente tu poema como todo lo tuyo José Antonio un abrazo grande
ResponderEliminarHermoso
ResponderEliminarLa penumbra acompaña la intimidad de estar con los que fueron, fuimos..
Me gustó mucho!!
Excelente José, como siempre sus poemas.
ResponderEliminarStella Maris Soria
Un poema muy logrado José y además con buenas imágenes.
ResponderEliminarAna Romano.
Estupendo poema, gran oficiante Cedrón. Alfredo Lemon desde Córdoba
ResponderEliminarLa luz y la sombra, la penumbra! Excelente!
ResponderEliminarGracias
LECCIÓN DE VIDA. ASHIERO. SUSANA ZAZZETTI.
ResponderEliminarPrecioso José Antonio. Mariel
ResponderEliminarTan cierto, José!
ResponderEliminarBesossss
Mónica Angelino
Muy bueno. Abrazo. Inés Legarreta.
ResponderEliminarBuen poema, querido amigo poeta. Un abrazo, Elena Eyheremendy
ResponderEliminarHermoso poema. Gracias, querido José Antonio. Un abrazo! Elena Eyheremendy
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